Esta salsa agridulce combina 38 % de mango maduro y 24 % de cebolla caramelizada de forma natural, aderezadas con vinagre de vino y especias como pimentón, clavo, canela y jengibre. El resultado es un chutney de mango y cebolla, condimento rico en polifenoles, con capacidad antioxidante, y en fibra soluble procedente de la fruta y la cebolla, que favorece la digestión y estimula la microbiota intestinal.
Su contenido energético medio (172-265 kcal/100 g) es inferior al de salsas cremosas o barbacoa, ya que no incluye grasas ni lácteos. Además, al estar gelificado con pectina de cítricos y conservado con sorbato potásico, ofrece estabilidad sin recurrir a ingredientes artificiales de mala reputación en etiquetado.
Cómo usar el chutney de mango y cebolla en recetas saladas y dulces
Carnes blancas y asados: Acompaña solomillo de cerdo, pechuga de pavo o costillar de cordero. El contraste dulce-ácido realza los jugos de la carne.
Quesos y embutidos: Sirve una cucharada sobre queso brie caliente o junto a un surtido de charcutería; la nota especiada equilibra grasas.
Hamburguesas y bocadillos gourmet: Sustituye la cebolla caramelizada tradicional por chutney y añade rúcula y queso curado para una combinación crujiente y jugosa.
Toppings creativos: Úsalo como “swirl” sobre hummus o crema de queso; aporta color y une sabores dulces y salados.
Postres con contraste: Prueba una cucharadita sobre helado de vainilla o yogur natural. El mango y la canela recuerdan a postres exóticos como el lassi hindú.
Elaboración del chutney de mango y origen de sus matices exóticos
El chutney, originario del subcontinente indio, fue adoptado por la cocina británica para conservar fruta con vinagre y especias. La Vieja Fábrica adapta la receta sustituyendo el mango indio por mango de origen andaluz durante temporada, aportando frescor y sostenibilidad. La cocción lenta permite que el azúcar se caramelice con los jugos de la cebolla, logrando una textura melosa, mientras que las especias liberan aceites esenciales que perfuman la salsa sin ocultar el sabor afrutado.
Consejos de maridaje y conservación
Punto de picante: No contiene guindilla; el pimentón aporta calidez suave, apta para paladares sensibles.
Mejora con el tiempo: Como los encurtidos, los sabores se redondean tras unos días de reposo. Conserva el tarro en la nevera y agita antes de servir.
Raciones: Una cucharada (20 g) es suficiente para aromatizar un plato individual; rinde para más de 35 porciones en el formato de 770
- ¿Con qué carnes combina mejor el chutney de mango y cebolla?
Funciona especialmente bien con carnes blancas —pollo, pavo o cerdo— y con cordero asado gracias a su equilibrio dulce-ácido-especiado. - ¿El chutney de mango y cebolla es picante?
No, su perfil es suave; el pimentón y el jengibre aportan un toque cálido sin resultar picante. - ¿Dónde comprar chutney de mango y cebolla en España?
Está disponible en la tienda online de La Vieja Fábrica y en su red de distribuidores gourmet.
